En FisioClinics Logroño sabemos de la importancia de los cuidados y la salud de los más pequeños desde los primeros días de su nacimiento hasta la pubertad por lo que ofrecemos un servicio de osteopatía pediátrica en el que se valorará de forma íntegra el estado de salud del bebé y los posibles problemas derivados que hayan podido surgir a raíz del parto o de su día a día.
El tratamiento inicial de las posibles disfunciones en nuestros bebés es crucial y en cuanto se realice de la forma más prematura posible -y de carácter preventivo- ya que la capacidad de curación y corrección es mayor cuanto más pequeños son. Las técnicas que usamos son influenciadas por la medicina oriental y están adaptadas a cada uno de los bebés no siendo agresivas en ningún caso pero sí sutiles y de forma muy suave.
¿Qué servicios ofrecemos en FisioClinics Logroño de Osteopatía Infantil?
Con frecuencia tras el parto la zona más afectada en el bebé suele ser la cabeza por las presiones derivadas del mismo o el uso de herramientas para su nacimiento, lo que suele producir tensiones en las membranas intracraneales y articulaciones. Así mismo la mayoría de los recién nacidos tienen alguna lesión de carácter asintomático pero que podrían afectar en un futuro desarrollo de sus capacidades tanto motoras como neurológicas.
Las lesiones más habituales que padecen los recién nacidos y a las que damos tratamiento son: cólico del lactante, problemas de deglución, problemas digestivos (reflujo, gases, estreñimiento), asimetrías craneales, plagiocefalia, escoliosis, otitis y bronquitis, problemas del sueño...
¿Cómo abordamos los diferentes problemas del bebé en la sección de Osteopatía de FisioClinics Logroño?
A partir de la valoración inicial podremos ver que disfunciones tiene el bebé y proceder a un tratamiento adaptado a sus necesidades.
Además de los problemas anteriormente citados también abordamos cualquier patología habitual que puede presentarse en los más pequeños como esguinces, problemas de movilidad, zonas dolorosas, etc. Estos tratamientos son igual de importantes que los anteriores para evitar en el futuro las adaptaciones en sus cuerpos que puedan generar desequilibrios musculo-esqueléticos y problemas motores que generen disfunciones o compensaciones cuando crezcan.