Luego de un esguince de tobillo la inestabilidad es una de las alteraciones que más se atienden en las consultas de fisioterapia, esto se debe a que muchas veces no se aborda el tratamiento de manera correcta. A continuación, te explico cómo esto se puede solucionar, con un novedoso método llamado flossing, que aporta múltiples beneficios para recuperar la estabilidad.
¿Qué es el esguince de tobillo?
El esguince de tobillo es una lesión de tipo ligamentosa, en donde existe una rotura o distensión de los ligamentos que proporcionan estabilidad al tobillo. Muchas veces esta lesión se da como consecuencia de una torcedura o contusión.
Por lo general, se cree que esta lesión no requiere de gran atención, pero realmente si no se aborda de la manera correcta bajo un tratamiento de rehabilitación fisioterapéutica global se pueden presentar ciertas complicaciones que pueden afectar la biomecánica de la marcha.
La fisioterapia juega un papel fundamental para evitar que el esguince se convierta en una lesión recidivante…
Esguince de tobillo
Si has sufrido de un esguince de tobillo y quieres saber en qué consiste esta lesión, su clasificación, causas, el tratamiento y recomendaciones, este video es para ti. Recopilamos toda esta información para que sepas como tratar esta lesión y puedas tener una pronta recuperación.
Incidencia
Más de 10.000 de personas sufren un episodio que les genera un esguince de tobillo al día. Esta lesión se presenta con mayor frecuencia en deportistas que hacen entrenamiento con carga, pero también puede generarse en cualquier situación a cualquier persona en general.
¿Qué es el método flossing?
El método flossing es una herramienta de la fisioterapia que implementa bandas de compresión elástica, llamadas floss bands. Estas se emplean con el objetivo de aumentar el grado de movilidad de las articulaciones y para conseguir alivio del dolor.
Las floss bands son unas bandas hechas de goma, que se colocan alrededor de las articulaciones o músculos afectados. Al colocarlas impiden parcialmente el flujo sanguíneo, mientras que el fisioterapeuta realiza ejercicios de movilidad durante algunos minutos.
El flossing es una práctica orientada a mejorar la masa del músculo y su fuerza…
¿En qué consiste el flossing?
El flossing consiste en un método terapéutico usado en el área deportiva, en donde el flujo sanguíneo del músculo es mecánicamente restringido por un torniquete flexible alrededor de la extremidad afectada por el dolor, la movilidad restringida o el dolor. Al mismo tiempo, se realizan una serie de ejercicios activamente.
Este método simula un entrenamiento de alta intensidad, esto debido a que artificialmente al reducir el flujo sanguíneo y al activar los músculos durante el ejercicio se obtienen efectos fisiológicos como si se sometiera al cuerpo a un entrenamiento de la intensidad. Pero, realmente estamos trabajando con una intensidad baja.
¿Qué efectos conseguimos con este método flossing en el organismo?
La aplicación de este método genera diferentes efectos inmediatos sobre el organismo, principalmente al reducirse el flujo sanguíneo se produce una isquemia local que exprime el líquido tisular. Mientras que al desenrollar la banda se produce un efecto inmediato de vasodilatación, aumentando el flujo sanguíneo y consiguiendo un efecto tipo esponja en los tejidos. Además, a nivel de la piel y fascias estos efectos de vasodilatación actúan sobre las posibles adherencias y alteraciones.
Mientras que, a nivel articular se produce un efecto beneficioso sobre las cápsulas y ligamentos, que permiten una integración propioceptiva y sensoriomotora. Que permiten recuperar la estabilidad articular.
Sus efectos son:
-
Isquemia local: la isquemia temporal mejora la eficacia de la contracción muscular, lo que favorece el aumento de la fuerza muscular y la contractilidad. Esto nos permite una mayor eficacia del acoplamiento excitación-contracción del músculo.
-
Neuromodulación del dolor (analgesia): la activación de diferentes tipos de receptores y terminaciones nerviosas nos permiten modular el procesamiento del dolor a nivel central, lo que genera alivio y desensibilización en la zona.
-
Eliminación de sustancias tóxicas y aumento del retorno venoso: producto de la isquemia local y al drenaje linfático que proporciona la técnica.
-
Drenaje linfático: debido a la combinación de la interrupción del flujo sanguíneo y el movimiento, lo que favorece el flujo de la linfa y facilita el funcionamiento del sistema linfático.
-
Aumento del umbral de dolor del paciente: La presión ejercida por la banda elástica (floss bands) estimula receptores de la piel del tacto, presión y temperatura, que serán procesados a nivel del sistema nervioso central obteniendo una respuesta inhibitoria que genera analgesia local.
-
Aumento de la amplitud articular: al estar inhibido el dolor, permitirá que el paciente pueda movilizar con mayor libertad la zona.
Objetivos del método flossing
Los objetivos del flossing son disminuir el flujo sanguíneo del área a tratar, para producir una isquemia local y neuromodular la información dolorosa. Con el propósito de ganar más grados de movimiento, fuerza y estiramiento.
Beneficios del flossing en el esguince de tobillo
Entre sus múltiples beneficios destacan:
-
Alivio del dolor.
-
Aumento de la movilidad.
-
Aumento de la propiocepción.
-
Aumento de la estabilidad del tobillo.
-
Aumento de fuerza en la articulación tibioperonea astragalina.
-
Disminución de las inflamaciones.
-
Elimina los edemas del miembro inferior.
-
Aceleración de los tiempos de recuperación de la lesión.
-
Optimiza el rendimiento deportivo.
-
Mejora el rendimiento del salto y el sprint en atletas y deportistas.
Contraindicaciones de flossing
Existen algunos aspectos que se deben tomar en cuenta al momento de aplicar esta técnica, entre ellos destacan:
-
Alteraciones cutáneas: como heridas, quemaduras, irritaciones.
-
Alergia a la banda elástica.
-
Enfermedades del sistema vascular: como trombosis.
-
Tumores.
-
Insuficiencia cardíaca.
Tipos de vendaje con flossing
Entre los tipos existen diferentes colores y funciones de resistencia compresiva, desde la suave hasta la más rígida. La función con la que se emplea va a depender del proceso agudo o crónico de la patología del paciente y la elección del color dependerá de la evolución de la lesión.
¿Cómo se utiliza el flossing para mejorar la movilidad del tobillo?
En primer lugar, antes de aplicar el flossing es muy importante realizar uno o varios test que nos den información sobre la movilidad del tobillo en un determinado movimiento. Además del test, podemos añadir una escala numérica para que el paciente nos refiera la intensidad del dolor al realizarlo. Estos nos van permitir llevar un control sobre la evolución del paciente.
La técnica de aplicación es sencilla, colocamos el vendaje en la región a tratar, de distal a proximal, y comprimimos el segmento al menos 2 minutos realizando una flexión dorsal y plantar sin carga. Durante este proceso, también podemos realizar trabajos de movilidad pasiva para ganar grados de amplitud articular.
Parámetros de colocación
Los parámetros son los siguientes:
-
La mitad de la banda debe estar superpuesta en cada envoltura. Además, es necesario un buen agarre para poder movilizar adecuadamente los tejidos.
-
El rango de fuerza de estiramiento debe ser entre un 50-90% de la longitud de la banda. Con una elasticidad de tensión uniforme, esta se dosifica con precisión y se ajusta dependiendo de las estructuras que se manipulan.
-
Entre 1´-3´ repeticiones.
-
Quitar la banda y andar para permitir que el flujo de sangre regrese a la articulación.
A la hora de quitar el vendaje, lo deberemos de hacer de forma rápida, para producir un efecto de vaciado de sustancias. De esta forma, se aumenta de forma repentina el flujo sanguíneo, con sangre oxigenada.
Aplicación en tobillo
La técnica se emplea con el paciente en supino, con el pie sobresaliendo por fuera de la camilla. La posición del pie es con la punta hacia el techo, quedando la articulación del tobillo en 90º de dorsiflexión. Iniciando desde la cabeza del primer metatarsiano hacia el quinto meta, damos un par de vueltas en espiral al flossband, para fijar (sin superar el 50% de tensión de la banda).
Luego, envolveremos la banda alrededor de la articulación del tobillo en forma de ocho, pasando la banda elástica justo por encima de la línea media del tobillo en dirección al maléolo peroneal y siguiendo por la zona del tendón de Aquiles, para volver a la cara lateral del pie, pasando por encima del maléolo tibial. La banda debe superponerse y cubrir al menos un 50% en cada vuelta que demos, con una tensión entre el 60-80%.
Repetiremos el mismo proceso hasta el final de la banda, cubriendo por completo la articulación del tobillo y dejando libre la zona del calcáneo. Al llegar al final del vendaje dejaremos unos 5 cm aproximadamente de banda para fijar, lo haremos metiendo el extremo que nos ha sobrado por dentro de la última vuelta que dimos.
Secuencia de la aplicación del flossing en tobillo
Protocolo de tratamiento activo: Una vez que se aplicaron los flossbands, el paciente realiza una secuencia de tres ejercicios de movilidad activa:
-
Movilidad máxima activa con ejercicios en flexión plantar y dorsal durante 1 minuto (decúbito supino).
-
Flexión dorsal forzada con ejercicio en carga durante 1 minuto (bipedestación)
-
Flexión plantar máxima con ejercicio en carga durante 1 minuto (bipedestación)
Sin duda alguna el Flossing es un método novedoso utilizado por los profesionales del deporte y la fisioterapia deportiva. Su objetivo principal es ayudar a desarrollar las tareas de movilidad articular, proporcionando múltiples beneficios que permiten combatir la inestabilidad articular y recuperar la funcionalidad del tobillo. En FisioClinics Logroño contamos con fisioterapeutas altamente capacitados en este método, que podrán ayudarte a recuperar la estabilidad de tu tobillo.